Seguro has escuchado los reiterados despidos en grandes empresas tecnológicas como Google, Twitter, Disney y startups diversas, como Domestika. Perder el trabajo es una experiencia que muchos han vivido o, posiblemente, tendremos que pasar algún día, y aunque es un momento que nos genera sentimientos negativos muy válidos, como preocupación, miedo y tristeza, también es una oportunidad para reinventarse aprendiendo nuevas habilidades, desarrollando otros talentos y, con ello, poder reincorporarse al mercado laboral en algún rubro que genere mayor crecimiento.
- ¿Qué hacer?
- Claves para reintegrarte
Qué hacer después del despido
Un despido es un proceso que afecta en distintos niveles, como el psicológico y el económico. Aunque es primordial regresar al mundo laboral lo antes posible, no hay que permitir que la angustia y la desesperación nos obliguen a tomar decisiones precipitadas y a aceptar cualquier trabajo por tener una entrada económica, porque hacer algo que no nos gusta puede traer consecuencias nada positivas a corto o mediano plazo en nuestro trabajo.
A pesar del estrés que quizás experimentes, es importante realizar una pausa para recalibrar tu situación y así analizar qué quieres, qué habilidades tienes, cuáles te falta mejorar, saber qué están solicitando en la actualidad las empresas, etc. Llevar a cabo un autoanálisis te ayudará a buscar de manera precisa y te dará seguridad para hablar sobre tus cualidades en las entrevistas que vendrán.
Mientras empiezas la búsqueda de un nuevo empleo, aprovecha este tiempo tomando algunos cursos y actualizaciones que no podías hacer previamente. Lo esencial es mantenerte activo e informado sobre el entorno laboral para armar una buena estrategia.
Cómo reintegrarte al campo laboral
Encontrar empleo es un quehacer de tiempo completo y, por esa razón, es necesario crear un plan para conseguir una nueva oportunidad. Si tu motivo fue otro (como un año sabático, motivos personales u otros), estos puntos te ayudarán a que el proceso sea más certero.
- Actualiza tu CV
Lo primero y más importante es desempolvar tu currículum; actualízalo con los datos acerca de tus nuevas habilidades y experiencia. En la actualidad, es necesario tener una hoja de vida más dinámica con el fin de adaptarla a cada oferta laboral en la que estás interesado. Para captar la atención del reclutador, es recomendable aprovechar bien las 15 o 20 palabras de presentación que se ponen al inicio de la hoja; para eso, los expertos recomiendan que estudies la propuesta de trabajo que te interesa, ubiques las palabras clave y las combines con tu descripción; así debes jugar con los elementos para hacer una entrada llamativa y que se acople a los requerimientos de la compañía a la que lo vas a enviar.
- Buscadores de empleo
Hoy en día, es más conveniente utilizar los portales de empleo, cuya ventaja es que las búsquedas se pueden personalizar de manera precisa. Para lograrlo, es preciso hacer un listado de palabras que describan tu profesión y así acceder a estos sitios para buscar por empresa o por habilidades. Un ejemplo es LinkedIn, que no solo es una red social laboral, sino que, además, tiene una parte de búsqueda de empleo que es bastante funcional. Con el objetivo de causar mayor impacto, es fundamental que estés activo con algunos posteos positivos referentes a tu área de trabajo. Otras páginas son Glassdoor, OCC e Indeed, donde también podrás hallar ofertas que pueden ser de tu interés.
- Aprovecha tu networking
Una forma de conseguir una nueva oferta laboral es por medio de la gente que conoces o contactos, sin importar qué tan cercanos sean. Elabora una lista y prepara tu proceso para comunicarte con ellos, qué decirles, qué respuestas dar; de este modo, generarás seguridad y experiencia. Una vez que sientas que dominas un discurso, puedes dirigirte a los contactos que tienen mayores posibilidades de apoyarte. Un dato curioso es que los expertos aseguran que hay más probabilidad de encontrar empleo con personas que tienen ocupaciones diferentes a la tuya o con las que el contacto no es tan frecuente.
- Crea tu marca personal
Es muy conveniente trabajar tu propia marca; es decir: qué es lo que te hace diferente de tu competencia. La marca personal es una herramienta actual de negocios que te puede abrir puertas en distintas empresas y también es muy funcional si quieres emprender un nuevo negocio. La idea es que la bases en lo que te interesa, en tus fortalezas y en construir una excelente reputación.
- Prepárate para las entrevistas
Cada entrevista que hagas será diferente, incluso si es para un puesto similar; por ello, es básico que antes de asistir a una, realices una investigación sobre la organización a la que irás, cuál es su misión y visión para empatar tus conocimientos con su filosofía. Aprovecha la parte donde te piden hablar sobre ti y así poder mezclar tu historia personal con lo que la compañía requiere, de esta manera es muy probable que dejes una buena impresión.
Platícame en los comentarios cuál ha sido tu estrategia para encontrar un nuevo empleo, me gustaría conocer tu opinión y saber qué te ha servido para hacer una búsqueda más asertiva. ¡Hasta el siguiente post!
Imagen: pexels.com/Andrea Piacquadio
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