Jugar como en la infancia o como adultos puede ser igual de divertido. Hoy en día, podemos utilizar ese pasatiempo como un método de enseñanza para brindar herramientas que fomenten el crecimiento empresarial.
Para ello nos ayuda la gamificación, un conjunto de mecánicas y actividades diseñadas para mejorar, a través del juego, el desempeño profesional en el entorno laboral. Se trata de una excelente oportunidad para optimizar, tanto los procesos como el rendimiento de los trabajadores.
La gamificación, herramienta provechosa
Gitnux comparte algunos números sobre los beneficios de la gamificación:
- Un entrenamiento basado en gamificación motiva 22% más a los empleados que un entrenamiento tradicional.
- Nueve de las 20 empresas líderes listadas por Forbes usan la gamificación en sus estrategias de mercadotecnia.
- 78% de los empleados considera que la gamificación hace su trabajo más divertido e interesante.
- El desempeño de los empleados ante entrenamientos de este tipo aumenta un 24% contra quienes no lo tienen.
El juego puede utilizarse en las empresas para mejorar varias competencias, como la visión estratégica, la toma de decisiones y el aprendizaje constante. Se considera que el mercado de la gamificación logrará un valor superior a 4 mil millones de dólares para 2030.
Casos de éxito
Las empresas pueden beneficiarse de la gamificación. Un gran ejemplo es CaLLogix, firma que desarrolló un programa de actividades para que sus empleados participaran por medio de un sistema de puntaje y con ello mejoraron los hábitos físicos y redujeron el absentismo laboral en 80 por ciento.
Otro caso es el de Unilever, que tiene una plataforma basada en desafíos para que los empleados pongan en práctica todas las habilidades aprendidas. Los resultados de estos juegos ayudan a determinar las áreas de mejora del equipo.
Fortalece tu empresa con gamificación
Las estrategias de juego pueden acoplarse al sector en el que se desarrolla tu empresa. El primer paso es establecer el objetivo; por ejemplo, aumentar el trabajo en equipo, subir las ventas, aprender el uso de un nuevo programa que vaya a implementarse o un nuevo modo de laborar.
Aunque existen varias herramientas tecnológicas de gamificación a las que puedes recurrir, la base es la planeación. Puedes tomar en cuenta lo siguiente:
Establece las reglas del juego
En primera instancia, deja en claro cómo se llevará a cabo el proceso. El contenido debe basarse en la habilidad o meta que quieres lograr. Además, es de suma importancia que pongas reglas y que todos las conozcan y respeten.
Organiza el sistema de puntos
Plantea bien cómo se ganarán los puntos o los parámetros para alcanzar los niveles que hayas establecido.
Fija misiones
Los juegos sin retos son aburridos, así que debes crear misiones, ya sea que las trabajen de manera individual o en equipos. En esta parte del proceso captas la atención de los jugadores, ya que deben pensar y ejecutar una estrategia para alcanzar una solución.
Potencia la urgencia
El reto es más desafiante cuando hay límites de tiempo, porque agrega emoción y genera cierta presión motivadora en los participantes.
No olvides los premios
Las recompensas no deben faltar en este proceso. Puede ser algún regalo o alguna concesión laboral. También es importante reconocer públicamente a los ganadores, con el fin de destacar su logro.
Es momento de usar el juego para integrar a todo tu personal, motivarlo, lograr objetivos y mejorar el compromiso con la empresa. ¡A jugar se ha dicho!
¿Crees que la gamificación podría funcionar en tu empresa? Me gustaría conocer tu experiencia y opinión, así que te leo en los comentarios.
Te espero el siguiente jueves con otro tema, no olvides dejarme tus comentarios ¡Hasta el siguiente post!
Imagen: pexels.com
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