El emprendimiento femenino es un recurso importante para impulsar la igualdad: fortalece la economía, potencia el liderazgo de este género y se dan pasos firmes para caminar hacia la equidad. En este post conocerás cinco proyectos muy interesantes fundados por mujeres mexicanas.
Los números de las emprendedoras de México
La presencia femenina en la creación de empresas aún es incipiente: según una encuesta de Endeavor México, solo el uno por ciento de los emprendimientos de alto impacto están liderados por una mujer. Esto deja patente que todavía falta mucho por hacer para generar más proyectos con su participación, sobre todo en el área de la tecnología.
Aunque en la actualidad el rubro tecnológico es el que goza de mayor crecimiento laboral, la presencia de las mujeres todavía es baja: de acuerdo a un informe de Laboratoria y SAP, únicamente 10 por ciento son programadoras y el 15 por ciento de profesionales en nuevas tecnologías pertenecen al género femenino.
Los conocimientos tecnológicos son los que le van a dar a cualquier compañía el empuje para su crecimiento y permanencia en el futuro; por ello, es fundamental impulsar a las estudiantes a integrarse más a este sector y al de los negocios para continuar rompiendo la brecha de género. La buena noticia es que ya existen proyectos que muestran el potencial femenino y que son un modelo a seguir para las futuras emprendedoras. Aquí te dejo algunos ejemplos:
Stori: una oportunidad de crédito
Esta empresa está a cargo de Marlene Garayzar, que se unió a Bin Chen y tres socios más para fundar Stori, una fintech que tiene la finalidad de brindar créditos a quienes no cumplen el perfil que una institución financiera conservadora solicita. Sus creadores se enfocaron en este segmento desatendido por los bancos clásicos y, por ello, idearon distintos productos financieros hechos a la medida de cada persona y con la confianza del retorno del crédito. Esta organización, considerada unicornio, no tiene sucursales físicas y se basa en la tecnología para la gestión de sus productos en unión con sus clientes. Uno de sus planes es ampliarse al resto de América Latina.
Plenna, opción médica para ellas
Es una empresa de servicios médicos para mujeres y entra en la categoría de femtech, que es una combinación de tecnología con el cuidado de la salud. Lorena Ostos y Giovanna Abramo decidieron crear Plenna, una opción donde las consultas se pueden hacer en línea o presenciales, lo que les ayuda a llevar estos servicios a distintas regiones del país. La diferencia con los hospitales es que los pacientes pueden tener acceso a su historial médico e información por medio de la plataforma que tiene la compañía, aunado a que la atención está a cargo de personal médico totalmente femenino, lo que hace dar una atención más cálida.
Metagals: conocimiento tecnológico
La tecnología es una de las áreas en las que se requiere fomentar más la presencia femenina; ante esta premisa, Paulina Corral, Valeria Diez y Nadia Salinas formaron Metagals, una comunidad de mujeres que difunde conocimientos del ámbito cripto y Web3 junto con las tecnologías asociadas como metaversos o NFT.
Sus organizadoras se dieron cuenta de que este tipo de temas eran dominados, en su mayoría, por el género masculino. Ante eso, decidieron unirse para conversar sobre el universo tecnológico y hacer una invitación por redes sociales; pero lo que pensaron que sería un grupo pequeño, resultó todo lo contrario. Ahora tienen disponibles las reuniones Drink and Learn, las cuales se llevan a cabo en restaurantes; también realizan sesiones virtuales, talleres y utilizan sus redes sociales como medios para compartir información.
Gresmex, en contra de los gérmenes
Gabriela León Gutiérrez, ingeniera bioquímica industrial, tuvo una emergencia con su hijo debido a la presencia de rotavirus y, al verse en esta situación, decidió investigar acerca de cómo evitar el contagio de enfermedades por medio de virus, bacterias y otros patógenos. Junto con su hermano, Sergio León, ingeniero industrial, lograron producir una nanomolécula con la capacidad de eliminar gérmenes y la llamaron Nbelyax, con la que crearon productos de higiene para distribuirlos a nivel nacional e internacional.
Gabriela no solo se tuvo que enfrentar a la búsqueda de la molécula, sino también a los problemas financieros y de comercialización, porque la legislación mexicana no contaba con un apartado para nanoproductos, aunado a los procesos burocráticos. En la actualidad, Gabriela dirige Gresmex, que se encarga de llevar estas soluciones a distintos lugares del mundo.
Yana y la depresión
Con la finalidad de intentar solucionar los problemas de salud mental, Andrea Campos creó la app Yana, que mediante la inteligencia artificial, puede brindar apoyo a las personas que sufren depresión o ansiedad. El proyecto nace debido a que su creadora ha vivido con la primera desde los ocho años y de adulta encontró en la terapia cognitivo conductual una medida más adecuada para controlar sus estados depresivos. Ella decidió compartir esos conocimientos por medio de la programación de esta app, la cual empezó como un proyecto escolar y terminó en una herramienta que le ha servido a muchas personas, la cual hoy en día tiene más de siete millones de descargas.
Los casos anteriores son una muestra de que es posible formar un emprendimiento que genere un beneficio social, económico, de salud y tecnológico, y que las mujeres pueden hacer el cambio con ello.
¿Conoces algún otro proyecto femenino de este tipo? Si es así, platícame su historia en los comentarios, me gustaría conocerla. ¡Hasta el siguiente post!
Imagen: pexels.com/Kampus Production
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