La pandemia, las tensiones globales, la tecnología y otras preocupaciones como la sostenibilidad, han aumentado el interés en las empresas por el nearshoring. México parece tener una oportunidad con esta práctica, así como retos para aprovechar su auge.
El nearshoring es una estrategia por la que una compañía externaliza parte de su producción a uno o varios terceros, que suelen estar en otros países cercanos al sitio de origen y en condiciones semejantes (como el huso horario).
Algunas razones que han hecho de este tipo de estrategias algo relevante en la actualidad son varios acontecimientos mundiales muy conocidos:
- Las guerras comerciales, principalmente entre Estados Unidos y China.
- La crisis de suministros que se derivó por la pandemia de COVID-19.
- Conflictos geopolíticos como el de Ucrania y Rusia, teniendo consecuencias tales como el aumento del precio de los energéticos.
Esto ha aumentado los costos de actividades de logística, principalmente. Por estos y otros motivos, nuestro país es un punto muy atractivo para esta clase de acciones, específicamente para dos de las grandes economías mundiales: Estados Unidos y Canadá.
Nearshoring para atraer talento
Además de los productos físicos, el nearshoring también otorga una oportunidad para quienes brindan servicios profesionales, esencialmente de tecnología. De acuerdo a Michael Page, empresa enfocada en reclutamiento, México tiene ventajas para que países como Estados Unidos o Canadá contraten a talento local:
- Zonas horarias similares. Esto ayuda a garantizar tiempos cortos de respuesta.
- Afinidad cultural y dominio del inglés. Cerca del 28 por ciento de la población estadounidense es latina, además de que el nivel de este idioma en el país vecino sigue creciendo.
- Altos estándares a bajo costo. Especialmente en este punto, intervienen las diferencias cambiarias que tiene el dólar con monedas como la mexicana.
- Cercanía. Estar a pocas horas de vuelo de las dos naciones mencionadas facilita la reunión presencial y agiliza la construcción de relaciones, así como la colaboración.
Entre los beneficios del nearshoring respecto al reclutamiento de equipos y profesionales, se encuentra la estabilidad, lo que se traduce en una baja rotación y, por tanto, en la reducción de costos, el ahorro de tiempo y esfuerzos, la disminución de riesgos y la detección de nuevas posibilidades.
México y su potencial con el nearshoring
Si bien en nuestro país ya existen clusters, el interés por el nearshoring le da una oportunidad única a México para consolidarse como líder exportador. Además, tratados como el T-MEC ayudan a que las compañías accedan a ventajas comerciales en el territorio nacional.
También otros organismos han ofrecido distintos incentivos para agilizar estos procesos de relocalización. Por ejemplo, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) invirtió en 2022, junto con autoridades mexicanas, con el fin de cubrir gastos de relocalización de empresas en el país. Esta inversión se realizó por el potencial que se tiene: según estudios por el BID, México podría sumar a su PIB más de 35 mil millones de dólares al año solo por la exportación de bienes.
¿Qué cuidar sobre el nearshoring en territorio mexicano?
Parece que esta práctica será una oportunidad para abrir nuevas posibilidades de negocios y empleo en México. Sin embargo, también puede representar riesgos que hay que atender. De acuerdo a Viridiana Ríos, analista y doctora en gobierno por la Universidad de Harvard, existe la probabilidad, en un mediano plazo, de que Estados Unidos cambie la estrategia hacia el reshoring: llevarse toda la manufactura de regreso para que beneficios como los impuestos se paguen en su país. Por ello, acompañado con las acciones del nearshoring, será ideal que existan planes para aprovechar esta alternativa de inversión a favor del crecimiento de las organizaciones nacionales.
¿Contemplas el nearshoring en tus estrategias para este 2023? ¿Qué opinas del tema? Me encantará leer tus comentarios. ¡Hasta el siguiente post!
Imagen: pexels.com/Pixabay
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