Llevar una misma rutina de trabajo por un tiempo prolongado puede instalarnos en la monotonía. Esa actitud se refleja en la calidad de nuestras labores y, lo peor, también puede afectar nuestra salud, ya que al sentir que no avanzamos podemos generar estrés o ansiedad. Ante esta situación, debemos buscar actividades que nos empujen a adoptar una actitud positiva.
¿Cuál es el origen de la desmotivación?
Lo que nos motiva en nuestros 20 es diferente a lo que nos impulsa en los 30 o en otras décadas de la vida. Si te sientes un poco perdido, debes saber que no estás solo: uno de cada tres trabajadores suele ser quien esté motivado y muy comprometido en su trabajo.
Hay múltiples razones por las que la motivación puede aminorar: constante repetición de actividades, cambios súbitos de líderes o en el equipo, sentirte bajo un sistema de micromanagement, la incertidumbre en tu futuro laboral o, simplemente, un giro repentino en tus planes originales de vida.
Sal de tu zona de confort
Aunque no nos demos cuenta, la pérdida de motivación puede mantenernos en una zona de confort que nos ofrece un lugar estable en el que laboramos con toda confianza, pero a su vez, de manera paulatina, produce monotonía. De esta manera, buscar algo que nos motive nos presentará un reto y, en ese sentido, emprender nuevas actividades será muy positivo.
La motivación traerá grandes beneficios a tu vida y a tu entorno laboral. Se ha demostrado que una buena motivación laboral genera 19 por ciento más de ingresos en una empresa, comparado con trabajos que desdeñan este factor.
Acciones para mantenerte productivo
Ayelet Fishbach, experta en estudios de conducta y marketing de la escuela de negocios de la Universidad de Chicago, ha hecho algunas investigaciones con diversos tipos de trabajadores y, para tener un mejor rendimiento laboral, recomienda cuatro tácticas:
Fija objetivos, no tareas. Si tienes metas claras y específicas, podrás acercarte más a ellas que si trazas sólo algo abstracto. Específicamente en el trabajo, establecer propósitos ayuda a centrarte en los resultados y en las labores que disfrutas.
Encuentra recompensas. Si tu objetivo es mejorar la calificación de satisfacción de tus clientes o cerrar ciertos proyectos que están en el tintero, al lograrlos puedes darte un premio, desde unos días de vacaciones o adquirir un objeto deseado.
Enfócate en el progreso. La experta en conducta y marketing recomienda “dividir” el objetivo en otros más pequeños, con el fin de tener mejor control y garantizar el logro final. Puede ser semanal o quincenal, y esta frecuencia ayudará a mantener la motivación.
Aprovecha la influencia de los demás. Para mantener tu ánimo en alto ayúdate de tus amigos, mentores y gente cercana. Comenta cómo te sientes y plantea tus objetivos; así, ellos podrán compartirte alguna experiencia o recordarte lo esencial que resulta conservar tu enfoque.
¿Qué otra actividad podrías sugerir para romper la monotonía laboral? Me gustaría conocer tus propuestas, así que te leo en los comentarios. ¡Hasta el siguiente post!
Imagen: pexels.com/prateekkatyal
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