El smartphone, computadora o tableta con la que estás leyendo esta entrada existe, en parte, gracias al litio y las tierras raras, un conjunto de elementos que encontramos cada vez más en nuestra vida diaria y que objetos como los vehículos eléctricos ponen constantemente su uso en tendencia. Aquí te explico más sobre ellas.
¿Qué son?
Imagínate que hace más de 300 años, en una mina de Suecia se hallaron nuevos elementos químicos que, en ese momento, no tenían muchas aplicaciones en la vida cotidiana. Esos 17 elementos fueron llamados “tierras raras” porque casi nunca se encuentran en estado puro; en química pertenecen al grupo de los lantánidos. No figuraron sino hasta mediados del siglo pasado, cuando se supo que tenían propiedades magnéticas, muy útiles en el mundo moderno.
Massive Science señala algunas de la gran variedad de aplicaciones: desde su uso en los equipos de resonancia magnética, los reactores nucleares y equipos de rayos X hasta, en años recientes, equipos de computación, vehículos híbridos, entre otros. Los tres países más importantes que extraen las tierras raras son China, Australia e India, seguidos muy de cerca por Estados Unidos, Rusia y Brasil.
Los bemoles
Estos elementos en tendencia tienen tanto grandes ventajas como problemas considerables. Una de las cualidades que tienen es que, al contrario del oro, no son escasos, lo que significa que se pueden encontrar de manera más sencilla que el zinc o el plomo, por ejemplo.
Sin embargo, no todo es color de rosa, ya que una de las principales complicaciones en su extracción es el proceso de minería que se necesita para separarlos, pues usualmente se encuentran mezclados con otros minerales, y para aislarlos, se requieren procedimientos complejos que, además, son muy contaminantes.
Una de las formas que pueden resolverlo es el reciclaje; el problema es que aún está en ciernes. Solo en Europa, actualmente no se recupera ninguna de estas tierras raras, pero estudios señalan que a través del reciclaje se podrían obtener entre 40 y 75 por ciento de las necesidades de este tipo de elementos para ese continente en el 2050.
El sector privado está avanzando justo en el tema del reciclaje, como es el caso de Apple. Dicha empresa está iniciando la reutilización de las tierras raras para elaborar sus nuevos equipos, como sucedió con el iPhone 12, modelo en el cual se incluyeron elementos reciclados que, además, contribuyó a facilitar su cadena de suministro.
El interés del litio en México
Aunque como tal, el litio no es una tierra rara, se menciona a la par de ellas porque, en muchos casos, se usan en conjunto, específicamente en las distintas clases de pilas. De acuerdo al Servicio Geológico de Estados Unidos, en México existen más de 1.7 millones de toneladas de reservas, aproximadamente, y en Sonora se ubica uno de los yacimientos potenciales más grandes del mundo. Aunque otras naciones van adelantadas en el tema (como Chile y Bolivia), Óscar Ocampo, coordinador de energía en el IMCO, indica que una de las ventajas de nuestro país es la posición geográfica y el Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC), en el que se establecen acuerdos, por ejemplo, como el que el valor de contenido regional en las baterías de autos debe cumplir con el 75 por ciento y, con lo cual, México tiene la oportunidad de ser proveedor del mineral.
Aunque ya se avanzó con la creación de la empresa estatal LitioMx, expertos señalan que por la naturaleza en la que se encuentra en nuestro territorio (arcilla en vez de sales), su extracción es posible que resulte compleja. No obstante, hay signos de que puede llegar a ser una gran inversión, como el desarrollo de la compañía china Ganfeng, en Sonora, que espera obtener 35 mil toneladas de litio al año y que llevaría al país al top 10 de naciones proveedoras; sin embargo, esto aún es un plan que se ve a mediano plazo.
¿Conocías el tema? Las tierras raras están cada vez más en el ojo empresarial y esto no debe minimizarse, pues de acuerdo a los Criterios Generales de Política Económica 2023, toda la cadena de valor del litio (desde la extracción hasta la producción) tendrá un valor potencial de 12 billones de pesos; además, armadoras de autos como Ford ya están ensamblando modelos eléctricos en México.
¿Qué escenario crees que observemos sobre este asunto en el país? Déjame tu comentario. ¡Hasta el siguiente post!
Imagen: pexels.com/Pixabay
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